Fiesta de la Aurora 2019

El año pasado puse la homilía-reflexión que don Ginés José Pérez Almela, el día de Pentecostés (20 mayo), en la Plaza de los Auroros, en honor a la Virgen del Rosario dirigía a Auroros y acompañantes. Resaltó el texto de Benedicto XVI sobre la religiosidad popular, que ilumina mi actuar como párroco de este Lugarico, al encontrarme con esta hermosa tradición que es la Aurora que, a mi llegada, celebraba centenario.

“La fe tiene que ser la fuente principal de la piedad popular, para que ésta no se reduzca a una simple expresión cultural de una determinada región. Más aún, tiene que estar en estrecha relación con la sagrada Liturgia, la cual no puede ser sustituida por ninguna otra expresión religiosa”. Palabras de Benedicto XVI que guían mi actuar y las consideraciones que os he hecho en mensajes anteriores.

El pasado Pentecostés el Papa Francisco ha pedido a toda la iglesia vivir durante este mes de octubre un tiempo misionero extraordinario, en el centenario de la Carta apostólica de Benedicto XV, profética para una Iglesia misionera, no proselitista.  En su mensaje «Bautizados y enviados: la Iglesia de Cristo en misión en el mundo», dice el papa Francisco que ‘Todo bautizado y bautizada es una misión… cada uno de nosotros es una misión en el mundo porque es fruto del amor de Dios… que destina a todos sus hijos, desde siempre, a su vida divina y eterna’.

¿Cómo ser misión con la Iglesia desde las celebraciones de Nuestra Señora del Rosario por La Aurora de Javalí Viejo, implicados con la diócesis en profundizar en la misión del laicado?

Estos días de gota fría, al impetrar de la Madre de Dios, poner su mano misericordiosa sobre los elementos naturales y sobre el tejado de nuestro templo, y poderlo restaurar antes que venirse abajo el esfuerzo de los hijos de este Lugarico en levantarlo; me sentí en sintonía con las angustias y esperanzas de los Auroros. Aquellos hombres de fe sabían que el bien de sus familias con el fruto de su trabajo en la huerta, vendría del don fecundo de una lluvia que nutriera el rio, y ser librados de la lluvia incontenida que la arrasara en riada.

Cantaban rezando a la Madre del Dios encarnado, antes de iniciar su trabajo. Y confesaban al hijo de María, a Jesucristo, que en sus sufrimientos y en sus esperanzas, se hace historia con el hombre. Se sabían hijos de Dios, sintiendo que nunca serían dejados de su mano.

Pensaba ¿Qué dirán de estos rezos del cura y de los auroros, los que no creen?… Y traía a la memoria, lo que el año 2017 os decía: “Menospreciar la actitud religiosa (relación con Dios) como un atavismo de los miedos del hombre, es el ambiente: ‘Si Dios existe, es su problema (mayo 68)’. Por tanto, no puedo permitirme ni permitir formas de celebrar la Eucaristía, que confirmen a quien no tiene el don de la fe, que la comunidad cristiana que presido, y yo mismo, actuamos de actores en una representación, que… han venido, a contemplar expresiones de ese tipo religioso de hombre, expresiones culturales humanas, …pero sin sentido, vacías…”.

Y recordaba lo mal que me sentí en el Rosario de la Aurora del año pasado, cuando no había guía de oración, pensando en aquellos recios hombres, los auroros cuya tradición queremos hacer viva…  ¿Cómo se hubieran sentido, rodeados de videos y fotos?: ¿Preocupados en salir o hacer bien la foto del momento, o que su canto-oración quedara bien grabado para archivar en fonoteca folk?… ¡Cierto que no! Estarían más bien, poniendo toda su alma, dignos de ser escuchados por quien tiene los oídos abiertos a la voz de nuestras súplicas.   

Las Campanas de Auroros, que gracias a Dios nos acompañan cada año, no vienen como espectáculo, sino a unirse a la oración de todos y en algún momento protagonizarla, para ponerla con todos y por todos, con la mayor dignidad, en las manos intercesoras de la Madre de nuestro Salvador.

Sin oración, el bautizado no puede ser misionero. El Rosario de la Aurora, en este mes misionero convocado por el papa Francisco, vivido con su original espíritu, será testimonio de fe y oportunidad de Misión.

Recuerdo ahora lo que os dije en el 2016: “Sin el alma de un pueblo, no hay cultura de ese pueblo, sólo tipismos o costumbrismos que se mantienen sin saber por qué ni para qué, o por ser rentables para el turismo. / El alma de la Aurora es la fe en el Hijo de Dios nacido de María y por el Espíritu que Él ha enviado a su Iglesia, sentir tiernamente a su Madre como nuestra madre. / Mantener la Aurora será un milagro del Espíritu, hay que pedirlo con fe”.

Mi oración, a la Madre del Rosario, por los frutos misioneros de una Aurora purificada.

Con todo el cariño.

Pedro Luis Tortosa Padilla, vuestro Cura.

Aprovecho la oportunidad que me da nuestra Campana de Auroros Virgen del Rosario para enviar un cordial saludo a todos nuestros vecinos y también a la familia de la Aurora, no sólo de nuestro pueblo sino también de todo nuestro municipio y también de toda la Región de Murcia. Por que unos de los logros mas importantes conseguidos ha sido que nuestra fiesta de la Aurora sea conocida en toda la región y que sean muchas las personas que vienen a visitarnos y a escuchar este canto tan huertano y tan nuestro.

Este canto tan peculiar basado (como me contaba mi amigo Ginés Martínez) casi siempre en estilo antifonal (es decir dos coros que se contestan) y con cuatro voces que dan forma a sus cantos. Siendo el primer coro, el menos numeroso, el que alberga a las voces graves y agudas ayudados por la primera y la segunda que las que desarrollan la melodía y siendo el segundo coro el que alberga a la 1.ª y a la 2.ª para terminar de modelar estos sonidos.

Por tanto, es un trabajo en equipo, muy bien coordinado por su junta directiva la cual vela todo el año por mantener esta tradición y a la que desde aquí quiero aprovechar para dar mi enhorabuena por la cantidad de actividades que con motivo de la festividad de su patrona van a realizar, exposiciones, charlas, actividades culturales y musicales que enriquecerán nuestra cultura ya que vamos a tener una semana llena de actos que acabarán con el Encuentro de Campanas de Auroras.

Por tanto, solo me queda invitar a nuestro Lugarico a participar en estos actos y arropar tanto a nuestra campana como a la gente que va a venir a nuestro pueblo con tal motivo y seguir avanzando en la defensa de esta bonita tradición que las pedanías de la huerta defendemos y apoyamos para que siga siendo una seña más de nuestra identidad cultural.

Que el farol os ilumine
que la campana os guíe
y que la Virgen del Rosario os acompañe.

José Francisco Navarro
Alcalde de Javalí Viejo

En el mes de julio pasado tuvimos la satisfacción de ir a Navarra, concretamente a la población de Andosilla, ante la invitación que nos hicieron para el Encuentro de Auroros, que todos los años efectúan los compañeros de esa comunidad.

Ya son varias las ocasiones de que hemos dispuesto para confraternizar con ellos y procurar hacer un intercambio de cantos de la aurora, para que nos oigan  y comparen lo nuestro, con lo de ellos, que si bien, son diferentes, en cuanto a musicalidad  e instrumentación que acompañan a los mismos, en el fondo, son parecidos, ya que se ensalza a Nuestra Madre la Virgen María, en sus diferentes  advocaciones.

Ha sido mayor la alegría que he sentido, por el viaje  que hemos realizado todos juntos, ya que lo más importante de todo esto, es la relación existente entre nosotros, que nunca por nunca, se debe enfriar. Muy al contrario, debe de estar cada día más  metida en nuestra forma de ser y convivir, que ahora mismo tenemos, y se vea  acrecentada y admirada por todos los que nos contemplan.

Eso hará que nos sintamos reconfortados y seguros de nosotros mismos, cuando nuestra capacidad humana se sitúe en lo más alto de ese pensamiento. Este es el deseo de todos y, por supuesto, el de nuestra querida Virgen del Rosario.

En este proyecto de vida en Hermandad, nos encontramos y esperamos realizarlo, continuamente, con todos vosotros.

Felices Fiestas para todos y, como siempre, a vuestra entera disposición.

Modesto Ruiz Hellín
Hermano Mayor